Finalmente diagnosticado en Europa con el hígado prácticamente muerto, las suprarrenales sin funcionar, los riñones muy dañados, corazón, pulmones y huesos afectados, fatiga crónica y alergias muy severas que lo atacaban constantemente, el panorama no era muy alentador...
Eduardo es una persona sensible, pero de formación intelectual y razonamiento científico. Comprendió que era él mismo el principal actor en su proceso curativo y emprendió una investigación profunda para descubrir cómo podía curarse. Conoció, estudió y fue tratado por especialistas de varios sistemas de medicina alópata y alternativa, viajó a los Estados Unidos y por varios países de Europa conociendo a gente de muchísimo valor y renombre, sin embargo, nadie parecía realmente poder ayudarlo.
En esa búsqueda descubrió ZhiNeng QiGong y, aunque no llamó particularmente su atención en un principio, muy pronto empezó a tener una serie de reacciones fuertes a través de su práctica, lo que despertó en él una fuerte curiosidad que le hizo decidir investigarlo a profundidad.
Eduardo llegó a China en 1999 después de muchos años de trabajo personal profundo e intenso. Tenía más curiosidad que esperanza; iba desconfiado y cansado de buscar alternativas que lo pudieran ayudar a salir adelante y "vacunado" contra cualquier tipo de testimonio por más conmovedor que éste fuera. Ahí se entregó a la tarea de estudiar esta práctica que le había provocado efectos muy claros y tangibles. Con el tiempo y el trabajo encontró que el ZhiNeng QiGong es una práctica con estructura que no exige tener fe para que funcione, es una ciencia profunda de evolución integral que estaba llamando fuertemente la atención de investigadores europeos con los que Eduardo mantenía contacto.
Fue bendecido, al encontrar en un grupo de colaboradores muy cercanos al Maestro Pang, a sus instructores personales, quienes desde un principio lo acogieron para invertir en él más que un tratamiento, una instrucción generosa y amorosa que permitiría que ZhiNeng QiGong llegara más allá de las fronteras que entonces tenía.
Luego de un arduo entrenamiento como nunca se le había impartido a un extranjero, el éxito fue alcanzado; la vida de Eduardo cambió profundamente, empezando con su cuerpo.
Disfrutando de un nuevo nivel de salud y eternamente agradecido con sus Maestros e instructores, Eduardo regresó a los Estados Unidos en el año 2000 e introdujo ZhiNeng QiGong en el Chopra "Center" de "La Jolla", California; después ha impartido talleres en México, Islas Vírgenes Británicas, Jamaica y otros lugares de Estados Unidos. Actualmente sus alumnos están distribuidos por todo el mundo.
Previo a su trabajo con ZhiNeng QiGong, Eduardo tenía más de dieciséis años de experiencia en la enseñanza de prácticas Evolutivas Integrales - Cuerpo, Mente, Emociones y Espíritu, como Artes Marciales para el Desarrollo Integral y Meditación, entre otras.
Ha sido consejero de la sección de Vida del periódico Reforma, uno de los más importantes diarios de México y ha sido entrevistado en radio, televisión y medios impresos como uno de los más destacados instructores de ZhiNeng QiGong a nivel mundial.